Este artículo tratará un clásico de la literatura, el Conde Lucanor de Don Juan Manuel. Una vez más, os traemos el mejor resumen para repasar para exámenes, con un resumen general, un comentario de texto y un resumen por capítulos del Conde Lucanor. Todo disponible para descargar en PDF en los siguientes enlaces:
ÍNDICE
- 1 El conde Lucanor: resumen
- 2 El conde Lucanor: resumen por capítulos
- 2.1 Cuento I
- 2.2 Cuento II
- 2.3 Cuento III
- 2.4 Cuento IV
- 2.5 Cuento V
- 2.6 Cuento VI
- 2.7 Cuento VII
- 2.8 Cuento VIII
- 2.9 Cuento IX
- 2.10 Cuento X
- 2.11 Cuento XI
- 2.12 Cuento XII
- 2.13 Cuento XIII
- 2.14 Cuento XIV
- 2.15 Cuento XV
- 2.16 Cuento XVI
- 2.17 Cuento XVII
- 2.18 Cuento XVIII
- 2.19 Cuento XIX
- 2.20 Cuento XX
- 2.21 Cuento XXI
- 2.22 Cuento XXII
- 2.23 Cuento XXIII
- 2.24 Cuento XXIV
- 2.25 Cuento XXV
- 2.26 Cuento XXVI
- 2.27 Cuento XXVII
- 2.28 Cuento XXVIII
- 2.29 Cuento XXIX
- 2.30 Cuento XXX
- 2.31 Cuento XXXI
- 2.32 Cuento XXXII
- 2.33 Cuento XXXIII
- 2.34 Cuento XXXIV
- 2.35 Cuento XXXV
- 2.36 Cuento XXXVI
- 2.37 Cuento XXXVII
- 2.38 Cuento XXXVIII
- 2.39 Cuento XXXIX
- 2.40 Cuento XL
- 2.41 Cuento XLI
- 2.42 Cuento XLII
- 2.43 Cuento XLIII
- 2.44 Cuento XLIV
- 2.45 Cuento XLV
- 2.46 Cuento XLVI
- 2.47 Cuento XLVII
- 2.48 Cuento XLVIII
- 2.49 Cuento XLIX
- 2.50 Cuento L
- 2.51 Epílogo
- 3 Comentario de texto de El conde Lucanor
El conde Lucanor: resumen
La historia trata sobre las conversaciones entre el Conde Lucanor y su consejero Patronio. El Conde Lucanor plantea distintas situaciones y dilemas a Patronio, quien responde contándole cuentos y fábulas que encierran una enseñanza o moraleja aplicable al caso en cuestión.
A lo largo de la historia, Patronio cuenta un total de 51 cuentos al Conde Lucanor. Los temas son muy variados: el valor de la prudencia, cómo tomar decisiones acertadas, la importancia de elegir bien a los amigos y consejeros, los peligros de la avaricia y la envidia, la relevancia de la humildad y de evitar la soberbia, la conveniencia de hacer el bien y evitar el mal, reflexiones sobre el comportamiento que deben tener los señores con sus súbditos, etc.
En cada caso, tras contar el cuento, Patronio extrae la moraleja o enseñanza, explicando al Conde Lucanor cómo puede aplicarla a su situación. El Conde Lucanor queda siempre satisfecho con los consejos de Patronio, considerándolos muy sabios, y tiene la intención de ponerlos en práctica.
Al final de la historia, Patronio anuncia al Conde Lucanor que no desea seguir respondiendo a más preguntas suyas, pues considera que con los 51 cuentos ya le ha resuelto todas las dudas que tenía hasta el momento. Sin embargo, el Conde Lucanor encuentra la manera de hacerle una pregunta más, dando pie al último cuento sobre la importancia de la humildad.
El conde Lucanor: resumen por capítulos
En este caso, hemos hecho un resumen de El conde Lucanor por Cuentos, ya que es así como está estructurada la obra.
Cuento I
El Conde Lucanor le cuenta a su consejero Patronio que un hombre poderoso le ha dicho que quiere abandonar sus tierras y dejárselas a él. Patronio le aconseja desconfiar, pues puede ser una trampa para probar su codicia, y le cuenta la historia de un rey que puso a prueba a su ministro acusándolo falsamente de traición para verificar su lealtad. Al final, el ministro demuestra su inocencia y fidelidad al rey.
Cuento II
El Conde consulta con Patronio si debe hacer algo que le traerá críticas haga lo que haga. Patronio le cuenta la historia de un padre que llevaba en una burra a su hijo que criticaba todas sus decisiones. Para mostrarle que no se puede complacer a todos, el padre lo hizo montar y desmontar sucesivamente de la burra, recibiendo cada vez críticas distintas de los transeúntes. Así le enseñó a su hijo que no debe guiarse por las críticas ajenas cuando sabe que hace lo correcto.
Cuento III
El Conde le pide consejo a Patronio sobre cómo hacer penitencia por sus pecados sin tener que abandonar su estado ni dejar de luchar contra los moros. Patronio le cuenta sobre un ermitaño santo que tuvo una visión donde Dios le decía que tendría la misma gloria en el paraíso que el rey Ricardo Corazón de León. Extrañado, el ermitaño recibió la explicación de que un salto que dio el rey en una batalla al mar para luchar contra los musulmanes ante la duda de sus soldados le granjeó más mérito que todas las penitencias del ermitaño.
Cuento IV
Preocupado por la riqueza que ha alcanzado, el Conde Lucanor consulta a Patronio para saber cómo salvar su alma. Patronio le responde con la historia de un mercader genovés que, en su lecho de muerte rodeado de sus riquezas, se burlaba de su alma por abandonarlo teniéndolo todo. Pero su corazón apareció podrido en su arca de tesoros, como dice el Evangelio «donde está tu tesoro, allí estará tu corazón».
Cuento V
El Conde le cuenta a Patronio que un supuesto amigo que lo halaga demasiado le propone un negocio que parece ventajoso. Patronio le advierte que quiere estafarlo, y le ilustra con la historia de una zorra que adula a un cuervo que tiene un pedazo de queso para que cante con la boca abierta y se le caiga el alimento.
Cuento VI
Preocupado por conspiraciones en su contra, el Conde Lucanor le pide consejo a Patronio. Este le cuenta sobre una golondrina que advirtió a las demás aves que arrancaran el lino recién sembrado por los hombres para que no pudieran hacer redes. Como no le hicieron caso, la golondrina pactó con los hombres no ser captada, a diferencia de las otras aves.
Cuento VII
Patronio le recomienda al Conde Lucanor no confiar en cosas inciertas cuando este le cuenta sobre una propuesta muy ventajosa pero difícil de lograr. Le ilustra con el caso de doña Truhana, que yendo al mercado soñaba despierta con las riquezas que lograría hasta que, riéndose, se golpeó la frente y la olla con miel que llevaba se le cayó, con lo que perdió todas sus ilusiones.
Cuento VIII
Ante las peticiones de dinero que recibe, el Conde Lucanor le pregunta a Patronio a quién se lo debe prestar. Patronio le responde con el caso de un enfermo a quien estaban abriendo para curarle el hígado y un conocido le pidió un trozo para su gato, ilustrando que no se debe dar a otros lo que a uno mismo le hace mucha falta.
Cuento IX
El Conde le comenta a Patronio su dilema sobre si unirse a un antiguo enemigo poderoso para defenderse de otro. Patronio le responde con la historia de dos caballos enemigos que fueron lanzados a un león y que hicieron las paces y se defendieron mutuamente. Le recomienda al Conde Lucanor verificar la lealtad de su enemigo antes de aliarse.
Cuento X
Agobiado por la pobreza, el Conde Lucanor le pide consejo a Patronio. Este le cuenta sobre un hombre tan pobre que comía altramuces amargos y lloraba recordando su fortuna pasada. Vio luego a otro que comía la cáscara de los altramuces que él tiraba, lo que le hizo sentirse afortunado. Patronio le recomienda conformarse cuando hay otros en peor situación.
Cuento XI
El Conde ayuda a un hombre a conseguir un objetivo y luego este se niega reiteradamente a ayudarlo. Consulta a Patronio qué hacer. Este le narra la historia de un deán de Santiago que fue a Toledo a aprender nigromancia con el sabio Don Illán, quien mediante engaños le hizo creer que se convertiría en Papa para luego desengañarlo y echarlo. Le recomienda al Conde no volver a ayudar a quien no muestra gratitud.
Cuento XII
Preocupado por un poderoso vecino, el Conde Lucanor consulta a Patronio. Este le cuenta sobre una zorra que con halagos intenta hacer bajar a un gallo de un árbol para atraparlo. El gallo se asusta sin motivos y vuela de rama en rama siendo perseguido por la zorra hasta que lo atrapa. Patronio recomienda al Conde no dejarse intimidar y defender firmemente sus posiciones.
Cuento XIII
El Conde Lucanor le comenta a Patronio que algunos nobles dañan sus tierras y luego se disculpan diciendo que no pudieron evitarlo. Patronio le relata la historia de un cazador que atrapaba perdices en una red y lloraba por el viento en los ojos. Una perdiz creyó que lloraba por ellos, pero otra más vieja y sabia le dijo que no se fiara. Patronio recomienda al Conde evitar a quien le hace daño, aunque se excuse después.
Cuento XIV
Preocupado porque le aconsejan sólo acumular dinero, el Conde consulta con Patronio. Este le cuenta sobre un mercader de Bolonia que sólo buscaba riqueza y después de muerto su corazón apareció podrido en su arca de tesoros. Patronio le recomienda buscar también buenas obras y no sólo dinero.
Cuento XV
El Conde teme a un antiguo enemigo poderoso con el que firmó una tregua pero aún sospecha. Patronio le relata la historia de Don Lorenzo Suárez, que junto a otros dos caballeros fueron ante el rey Fernando por golpear las puertas de Sevilla presumiendo valor. Al regresar y ser perseguidos, el primero en volverse contra los moros actuó por miedo y el segundo con más valor, pero Don Lorenzo, que esperó ser atacado primero, demostró mayor valentía.
Cuento XVI
Aconsejado de dedicarse sólo al descanso por su edad, el Conde Lucanor consulta a Patronio qué hacer. Este le cuenta la respuesta del Conde Fernán González a Nuño Laínez, que le dijo que si descansaban perderían su tierra, pero si luchaba aumentaría su honra y su nombre permanecería tras su muerte.
Cuento XVII
Patronio recomienda al Conde Lucanor, ante una propuesta poco entusiasta pero provechosa, fingir gran interés como hizo un hombre pobre y hambriento que topó con un conocido comiendo y ante su tibia invitación aceptó efusivamente.
Cuento XVIII
Enfermo, el Conde Lucanor no puede acudir a un desafío crucial por una villa, lo que le aflige porque su adversario obtendrá poder y honra. Patronio le cuenta que Don Pedro Meléndez de Valdés se rompió una pierna yendo a ver al rey que lo quería matar por calumnias, salvándose así, por lo que decía que lo que Dios hace es lo mejor.
Cuento XIX
El Conde comenta a Patronio que un pariente de su enemigo se le ofrece como aliado para vengarse de él. Patronio le advierte que no se fíe y le cuenta sobre cómo grajos con plumas de cuervo se infiltraron y espiaron a los búhos para luego atraer a los cuervos a su aniquilación.
Cuento XX
Ante una propuesta de negocios que requiere invertir para grandes ganancias, el Conde Lucanor pide consejo a Patronio. Este le cuenta de un pícaro que engañó a un rey diciendo que podía fabricar oro, robándole mucho dinero. Le recomienda al Conde no arriesgar su fortuna en cosas de resultado incierto propuestas por pobres.
Cuento XXI
Encargado de la educación de un joven pariente de un vasallo, el Conde Lucanor le pide consejo a Patronio sobre esto. Patronio le habla de cómo un sabio simuló entender el lenguaje de los pájaros para reprochar, mediante lo que decían, al joven rey que educaba sus descuidos en el gobierno del reino poniéndolo en riesgo.
Cuento XXII
Preocupado por rumores sobre un gran amigo y aliado, el Conde consulta a Patronio. Este le cuenta cómo una zorra y un cordero incitaron problemas entre un león y un toro aliados para liberarse de su yugo, pero debilitados luego ambos fueron presa de los demás. Le recomienda que semejantes testimonios no empañen una firme amistad.
Cuento XXIII
Ante el consejo de disfrutar de sus bienes, el Conde Lucanor pide la opinión de Patronio. Este le relata el ejemplo de las hormigas, que tras proveer sus hormigueros hacen salir el grano durante las lluvias para que no germine y tape sus galerías, alimentándose después de lo que queda. Le recomienda al Conde siempre seguir progresando y no malgastar su herencia.
Cuento XXIV
Deseoso de saber qué jóvenes servidores suyos serán notables, el Conde le consulta a Patronio. Este le narra cómo un rey puso a prueba la prudencia de sus tres hijos para elegir sucesor mediante cómo pedían las cosas necesarias para que cabalgara, sin ver más allá. El menor criticó sus conquistas, por lo que fue escogido. Patronio señala al Conde que la apariencia no cuenta tanto como la prudencia mostrada en dichos y obras para vislumbrar el futuro de un hombre.
Cuento XXV
El Conde Lucanor pide consejo a Patronio sobre un vasallo que le consultó con quién casar a una pariente. Patronio le cuenta la historia del conde de Provenza, quien siendo prisionero de Saladino le pidió consejo sobre cuál pretendiente elegir para su hija. Saladino le dijo que con un hombre, y resultó escoger al mejor. Por ello Patronio recomienda fijarse en la valía del candidato sobre todo.
Cuento XXVI
Preocupado por unos embusteros, el Conde plantea a Patronio si debe también mentir para contrarrestarlos. Patronio le relata cómo la Mentira convenció a la Verdad de quedarse bajo tierra con las raíces de un árbol, mientras la primera disfrutaba de ramas y flores, hasta que crecido sin raíces cayó y aplastó a la Mentira y su séquito. Le recomienda al Conde atenerse siempre a la verdad aunque tenga menos frutos que la mentira.
Cuento XXVII
Un emperador se casó con una mujer malhumorada que hacía siempre lo contrario de lo que él quería. El emperador intentó corregirla, pero no lo consiguió. Finalmente, el emperador ideó un plan para deshacerse de ella utilizando unas hierbas venenosas. La emperatriz, por llevarle la contraria, se untó con las hierbas a pesar de las advertencias y murió envenenada.
Cuento XXVIII
Don Lorenzo Suárez Gallinato mató a un sacerdote renegado que estaba entregando una hostia consagrada a unos moros para burlarse de ella. Los moros querían matar a Don Lorenzo, pero el rey moro lo defendió alabando su valor y fe cristianos.
Cuento XXIX
Una zorra se hizo la muerta en la calle para que la gente no la molestara. Pero varias personas le fueron cortando partes del cuerpo creyendo que tenía propiedades curativas. Cuando fueron a sacarle el corazón, la zorra huyó para salvar su vida.
Cuento XXX
El rey Abenabet de Sevilla estaba muy enamorado de su mujer Romaiquía, que era caprichosa. El rey intentaba complacer todos sus antojos. Un día Romaiquía empezó a llorar porque nunca la dejaba ir a donde nevaba. Entonces el rey mandó plantar almendros en la sierra de Córdoba para que florecieran en febrero y Romaiquía pudiera ver nieve.
Cuento XXXI
Unos canónigos y unos franciscanos discutían sobre quién debía tocar las campanas primero. El pleito duró mucho tiempo hasta que un cardenal sentenció que «el que se despierte antes, taña antes».
Cuento XXXII
Tres pícaros engañaron a un rey haciéndole creer que tejían una tela mágica que sólo podían ver los hijos legítimos de sus padres. Nadie se atrevía a decir que no veía la tela por miedo a parecer bastardo. Al final, un niño inocente dijo que el rey iba desnudo en la procesión.
Cuento XXXIII
Un halcón perseguía a una garza, pero un águila atacaba al halcón cada vez que se acercaba a ella. Finalmente, el halcón atacó y venció al águila y luego mató a la garza. Esto enseña que primero hay que deshacerse de los enemigos más cercanos antes de combatir a los más poderosos.
Cuento XXXIV
Un ciego guiaba a otro ciego. Ambos cayeron en un precipicio porque el que guiaba tampoco podía ver el peligro. Esto enseña que no debemos confiar sólo en quienes están en la misma situación que nosotros.
Cuento XXXV
Un hombre inteligente se casó con una mujer rebelde. La primera noche, el hombre mató a su perro, a su gato y a su caballo por no obedecer sus órdenes. La mujer, temiendo por su vida si lo desobedecía, se volvió desde entonces muy complaciente.
Cuento XXXVI
Un mercader que había estado ausente mucho tiempo, regresó y encontró a su mujer con su hijo, al que no conocía. Pensando que le era infiel, quiso matarlos, pero luego se dio cuenta de que era su hijo. Esto le enseñó a no actuar precipitadamente por ira.
Cuento XXXVII
El conde Fernán González, después de derrotar a Almanzor en la batalla de Hacinas, no descansó y marchó herido a luchar contra el rey de Navarra cuando supo que invadía sus tierras. Esto enseña que no debemos rendirnos al cansancio cuando está en juego el honor.
Cuento XXXVIII
Un hombre que transportaba piedras preciosas se ahogó en un río por no soltar su carga. Esto enseña que no debemos anteponer las riquezas materiales a la propia vida.
Cuento XXXIX
A un hombre le molestaban los gorriones y las golondrinas. Un amigo le dijo que podía librarlo de una de las dos plagas. El hombre eligió deshacerse de los gorriones porque, aunque más ruidosos, las golondrinas no anidaban siempre allí. Esto aconseja combatir antes a los enemigos más cercanos que a los lejanos.
Cuento XL
Un general ordenó que rezasen por su alma sólo después de muerto. Una endemoniada dijo que su alma estaba en el infierno porque Dios premia las buenas obras sólo si nacen de un corazón sincero y no por vanidad.
Cuento XLI
El rey Alhaquen de Córdoba era ocioso y no buscaba acrecentar su fama. Un día añadió un agujero a un albogón para mejorar su sonido. La gente se burló diciendo «éste es el añadido de Alhaquen». Entonces el rey terminó la construcción de la impresionante mezquita de Córdoba. Desde entonces la frase se convirtió en un elogio.
Cuento XLII
Una falsa beata sembró cizaña entre un matrimonio feliz diciéndole a cada uno que el otro tenía un amante. Los esposos, creyendo las mentiras, se mataron el uno al otro. Todo el pueblo se enemistó y hubo muchas muertes. La beata fue torturada hasta la muerte.
Cuento XLIII
El Bien y el Mal vivían juntos. Cada vez que conseguían algo, el Mal engañaba al Bien con el reparto. Cuando el hijo del Mal estaba muriéndose, el Bien accedió a salvarlo si el Mal pregonaba que el Bien siempre vence al Mal.
Cuento XLIV
Tres caballeros fueron los únicos que acompañaron al conde Rodrigo el Franco en su viaje para curar su lepra. Lo sirvieron con abnegación hasta su muerte. A la vuelta los premiaron ricamente. Sus esposas también dieron muestras de lealtad.
Cuento XLV
Un hombre hizo un pacto con el demonio a cambio de riquezas. El diablo lo ayudaba en sus robos, pero cada vez tardaba más en socorrerlo. Finalmente no impidió que lo ahorcaran.
Cuento XLVI
Un filósofo entró en una calle de mala fama por necesidad. La gente pensó mal de él y dañó su reputación. Esto enseña que debemos cuidar nuestra fama evitando incluso la apariencia de maldad.
Cuento XLVII
Una mora decía tener mucho miedo a todo, pero ayudó impávida a su hermano a robar la mortaja de un muerto. Cuando volvía a casa, el sonido del agua en una jarra la asustó. El hermano le reprochó más miedo al agua que a descoyuntar al muerto.
Cuento XLVIII
Un hombre probó a sus supuestos diez mejores amigos pidiéndoles que escondieran un cadáver. Ninguno quiso arriesgarse. Sólo un amigo de su padre declaró que él había matado a la víctima para salvarlo de la horca.
Cuento XLIX
En un reino elegían gobernante cada año y luego lo despojaban de todo y lo abandonaban en una isla. Un gobernante construyó secretamente un refugio confortable en la isla para cuando acabara su mandato.
Cuento L
Saladino quedó cautivado por la mujer de un vasallo. Ella evitó ser deshonrada consiguiendo que Saladino buscase cuál es la mejor cualidad humana. Cuando Saladino dijo que la vergüenza, ella apeló a su sentido del honor para que la respetase. Saladino luego la colmó de riquezas a ella y su marido.
Epílogo
Un rey cambió las palabras del Magnificat por soberbia. Dios lo castigó dejándolo desnudo y no era reconocido por nadie. Cuando el rey se arrepintió sinceramente, recuperó su trono. Esto enseña que debemos tener humildad pero sin dejar de luchar por nuestros ideales y estado.
Comentario de texto de El conde Lucanor
AUTOR Y ÉPOCA LITERARIA:
«El Conde Lucanor» es una obra escrita por Don Juan Manuel, un noble, político y escritor español nacido en 1282 y fallecido en 1348. Don Juan Manuel vivió durante la Edad Media en la península ibérica y es conocido por ser un destacado representante de la prosa medieval castellana.
TEXTO Y OBRA:
«El Conde Lucanor» es una colección de cuentos escritos en prosa didáctica que forman parte del género conocido como «exempla». Fue completada alrededor de 1335 y consta de cincuenta y uno cuentos, cada uno acompañado de un consejo moral o enseñanza.
GÉNERO LITERARIO:
La obra se inscribe en el género de la prosa didáctica y moral, típico de la literatura medieval. Cada cuento busca transmitir una lección moral o ética a través de narrativas que ilustran situaciones cotidianas o extraordinarias.
FORMA:
La narración se realiza en tercera persona y tiene una estructura marcadamente encuadrada. Cada cuento comienza con la situación de un personaje, el Conde Lucanor, buscando consejo de su consejero Patronio. A partir de esta petición, Patronio presenta un cuento que ejemplifica la lección moral que el Conde Lucanor debe aprender.
La acción transcurre en la España medieval y refleja las costumbres y valores de la sociedad de la época.
CONTENIDO:
El contenido de «El Conde Lucanor» se centra en la presentación de situaciones complejas o dilemas morales a través de los cuentos. Cada historia se diseñó para enseñar al lector o, en el contexto de la obra, al Conde Lucanor, una lección valiosa sobre la vida, la sabiduría y la toma de decisiones.
La obra se puede dividir en cuentos independientes, cada uno presentando un conflicto y su resolución, seguido por el consejo moral que se extrae de la historia.
CONCLUSIÓN:
«El Conde Lucanor» es una obra única que combina elementos literarios y morales en un formato de cuentos encadenados. La habilidad de Don Juan Manuel para presentar lecciones valiosas a través de historias entretenidas revela su profundo entendimiento de la naturaleza humana y su contexto cultural medieval.
Personalmente, considero que «El Conde Lucanor» es una obra maestra de la literatura medieval española. La combinación de narrativa atractiva y sabiduría moral la convierte en una obra intemporal que sigue siendo relevante hoy en día. Don Juan Manuel deja una marca duradera con su contribución a la literatura española medieval y su capacidad para transmitir lecciones universales a través de historias cautivadoras.